PRENSA

Cristina Kirchner no recibirá al canciller israelí

A diferencia del brasileño Luiz Inácio Lula da Silva, la presidenta Cristina Kirchner no se reunirá con el ultranacionalista canciller de Israel, Avigdor Lieberman, mañana cuando llegue a la Argentina en el marco de su gira por la región. Será un gesto de distancia de la Casa Rosada con un dirigente con el que mantiene notorias diferencias respecto, por ejemplo, de su posición sobre la situación de los palestinos, por mencionar una entre muchas.
En sus contactos con funcionarios argentinos, Lieberman verá, según se anuncia, al canciller Jorge Taiana y probablemente al jefe de Gabinete, Aníbal Fernández. “Serán encuentros correctos, hasta ahí”, explicaban en el Gobierno. La idea es mantener el equilibrio: no dar muestras de afinidad, pero respetando la histórica buena relación que han mantenido Argentina e Israel.
“Más allá de lo que tenga que ver con el atentado a la AMIA y nuestros contactos con la comunidad judía, Israel fue siempre un amigo bastante importante de la Argentina”, subrayaban en el Palacio San Martín.
En el gobierno argentino marcaban que en Brasil también buscaban mantener el equilibrio. Ayer, al mismo tiempo que se confirmaba el encuentro de Lula con Lieberman, indicaban que en breve el brasileño también recibirá al presidente de Irán, Mahmud Ahmadinejad. En Buenos Aires se recorrió el mismo camino, pero al revés: Cristina Kirchner no se encontrará con el enviado israelí, pero el canciller Taiana recordó ayer que Argentina “se pronunció en contra de Irán ante Naciones Unidas”.
Según adelantó el vicecanciller israelí, Danny Ayalon, la gira de Lieberman busca frenar la supuesta “influencia iraní” y “la infiltración de Hezbolá” en el continente. Ante semejante perspectiva, en la Cancillería argentina se apresuraron en convertir el encuentro entre los dos ministros de relaciones exteriores en algo más parecido a la visita de una misión comercial. Por eso, Lieberman y Taiana no se verán a solas, sino con el resto de la comitiva israelí y los funcionarios argentinos dedicados a cubrir otros aspectos en el vínculo bilateral. “Tenemos varios temas en agenda para conversar con el ministro israelí: comerciales, bilaterales y políticas internacionales”, explicó ayer Taiana. Tendrán los minutos contados. Apenas finalice la reunión, Taiana se subirá al Tango 01 para acompañar a la Presidenta a la Cumbre del Mercosur, en Asunción.
En medio hay cuestiones delicadas. Dos gobiernos con los que Argentina mantiene un vínculo cercano –el de Venezuela y Bolivia– rompieron relaciones con Israel luego de la última ofensiva sobre la Franja de Gaza. Pero, al mismo tiempo, en la Casa Rosada recuerdan las exitosas gestiones realizadas ante Hugo Chávez para que recibiera a los dirigentes de la comunidad judía en Caracas.
En general, en los seis años de kirchnerismo, el Gobierno mantuvo una buena sintonía con la dirigencia judía: en cada visita que realizan a Nueva York para la época de la Asamblea General de la ONU siempre se hacen un espacio para conversar con las autoridades del Congreso Judío Mundial. Lieberman verá también al jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri; se reunirá con legisladores nacionales y con dirigentes de la comunidad judía y abrirá un seminario de negocios bilateral, según informó la Embajada de Israel en Buenos Aires.