Carlos Telleldín, absuelto en el juicio por el atentado a la AMIA, se puso ayer a disposición de la justicia pero ironizó sobre la orden que le prohíbe cruzar las fronteras argentinas, al sostener que «la Policía Federal nunca me entregó el pasaporte, así que es imposible que salga del país».
Pero además Telleldín recomendó a la comunidad judía y a la justicia «que busquen a los verdaderos responsables del atentado y no se dejen engañar nuevamente, porque al final el tiempo los va a llevar al mismo resultado: mi inocencia».
Telleldín, ex reducidor de autos y actualmente abogado, se presentó ayer en el juzgado federal de Rodolfo Canicoba Corral para aclarar su situación, luego de enterarse por los medios que le prohibían salir del país por pedido del fiscal Alberto Nisman ante la posibilidad de que se reabra la investigación en su contra.
El abogado defensor, Luis Sasso, dijo que el imputado «con esta disposición espontánea buscó aclarar que siempre estuvo a disposición del tribunal y la justicia y que hace cinco años que está en libertad, a derecho».
«Llama la atención que esta petición del fiscal que apunta supuestamente a resguardar los fines del proceso se haga respecto de un hecho
que ocurrió hace quince años, como si pudiese alterar algo de la prueba a esta altura», dijo Sasso. Y añadió que «sobre todo teniendo en cuenta que Telleldín es una persona que, con la ley del ‘dos por uno’, tiene 20 años de condena cumplida».
«No entiendo qué peligro pueda haber en que se pueda ir del país, más allá de que no lo pensara hacer», añadió.
Telleldín, por su parte, no sólo ratificó su inocencia sino que pareció ironizar sobre la nueva orden judicial. «A fin del año pasado pedí una autorización al juzgado para ir a una universidad europea y después se frustró porque la Policía Federal no me entregó el pasaporte hasta el día de hoy, así que es imposible que salga del país», dijo Telleldín.
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