El servicio alemán que investiga los crímenes del nazismo decidió trasladar a la Justicia archivos vinculados con los crímenes cometidos en el campo de exterminio de Auschwitz. Se trata de los expedientes de 30 ex presuntos guardias de Auschwitz, de los cuales el más anciano tiene 97 años, para que sean juzgados por complicidad en homicidios. El anuncio fue realizado por el fiscal especial Kurt Schrimm en una conferencia de prensa en Ludwigsburg (oeste). «Los informes van a ser remitidos a los fiscales correspondientes en los Estados regionales donde residen estos presuntos criminales de guerra», adelantó Schrimm. El Servicio Alemán de Investigación sobre Crímenes del Nacionalsocialismo, que Schrimm dirige, llevó a cabo más de 7000 investigaciones desde su creación, en 1958, pero no tiene la potestad de iniciar diligencias penales. A los fiscales les corresponde decidir si pueden entablarse demandas judiciales y si los acusados están en condiciones de ser juzgados. Este servicio identificó originalmente a 49 presuntos guardias del campo de Auschwitz, construido por los nazis en la Polonia ocupada. Nueve de ellos murieron; otros 30 viven aún en Alemania. Uno de los sobrevivientes es juzgado en este momento en Stuttgart. Más de 6000 personas trabajaron en Auschwitz, donde 1,1 millón de judíos, gitanos, homosexuales y opositores políticos fueron asesinados en las cámaras de gas, murieron de agotamiento por trabajos forzados o enfermos.