La entidad representativa de la comunidad judía argentina condena la profanación y los daños cometidos en la Iglesia de Fátima, en la ciudad bonaerense de Olavarría, donde un grupo de personas ingresó en el templo durante la madrugada del 1º de noviembre y destruyó confesionarios, bancos, imágenes religiosas, elementos litúrgicos, vidrios, libros y hasta incendiaron el altar.
El perverso agravio que lastima a la feligresía católica, ofende a toda la sociedad sin distinción de credos, vulnera sagrados principios de respeto a los lugares de culto e hiere la sensibilidad de todos aquellos que abogamos por la convivencia en la diversidad.
La DAIA, comprometida con la lucha contra toda forma de discriminación, con el diálogo fraterno entre los diversos credos y el respeto a todos los símbolos religiosos, hace llegar sus expresiones de solidaridad a los hermanos cristianos ante tales agravios.
Secretario General Vicepresidente 1º e.e.