PRENSA

Discurso del presidente de la DAIA, Julio Schlosser, en el Seder de Pesaj de Avodá

Levantamos nuestra copa para recordar que fuimos esclavos en Egipto y que la libertad ‎es un bien preciado, el mas preciado que transforma al ser humano en hombre que no se ‎negocia, no se vende no se compra y no se alquila y constituye un deber sagrado, un ‎mandato divino preservarla y custodiarla, enfrentándonos a todos quienes pretendan ‎cercenarla cualquiera sea su grupo de pertenencia.‎
La levantamos por nuestra comunidad, por su fortaleza y compromiso judío, por la ‎unidad de toda la comunidad en su diversidad de formas y de pertenencias, por la ‎educación y la continuidad, por el fortalecimiento de los valores y principios que nos han ‎legado los profetas.‎
Levantamos la copa por la seguridad y la dignidad de nuestros hermanos e instituciones, ‎renovando el compromiso irrenunciable de denunciar  y combatir con todas nuestras ‎fuerzas a los enemigos del pueblo judío, provengan de donde provengan y se vistan ‎como se que vistan. Contra el antisemitismo, el antisionismo y toda forma de ‎discriminación de exclusión, no solo del pueblo judío sino de cualquier minoría o ‎colectivo y en cualquier lugar del mundo.‎
La levantamos con orgullo y firmeza para que nuestro mensaje de claro repudio llegue a ‎los aspirantes a genocidas, negadores de la Shoá y protectores de terroristas de cualquier ‎signo político y el mismo sea claro y contundente.‎
Levantamos nuestra copa en homenaje y recordación a los mártires de nuestro pueblo, a ‎los muertos de la Shoá a los muertos de la Embajada a los muertos de la AMIA-DAIA y ‎a todos aquellos que fueron asesinados por el solo hecho de ser judíos en cualquier lugar ‎del mundo ratificando el compromiso sagrado de honrar su memoria.‎
Lo hacemos profundamente identificados con el Estado de Israel y su pueblo con ‎quienes estamos indisolublemente identificados.‎
Am Israel Jai ‎