La AMIA de La Plata y la filial local de la DAIA expresaron ayer a través de su presidente, Diego Elias Lacki, su “rechazo” a las expresiones emitidas días atrás por el canciller Héctor Timerman, quien renunció a las entidades y las acusó de “obstruccionistas” a la investigación del atentado ocurrido en 1994. Lacki expresó en un comunicado que “las afirmaciones vertidas por Timerman son “absolutamente infundadas y temerarias, así como también resultan calumniosas”, al acusar a los dirigentes de estas asociaciones de tener “un accionar obstruccionista” que “continúa impidiendo el avance en la investigación” sobre el ataque terrorista a la mutual de 1994. Desde las entidades platenses indicaron que es “loable y valiente” la conducta adoptada por los dirigentes de la AMIA y la DAIA para aportar la investigación en pos del esclarecimiento del trágico atentado. Y advirtieron que “pensar en un encubrimiento por parte de la dirigencia judía es provocar una herida en el corazón de todos los judíos que habitamos este país, y ese dolor es mayor porque proviene de un miembro de nuestra comunidad”.