La UFI del atentado a la AMIA-DAIA advirtió que la ex Secretaría de Inteligencia produjo información útil para la causa, antes y después del ataque a la mutual judía, pero no la remitió hasta que fue descubierta el año pasado. Esa información estaba distribuida en tres depósitos de la flamante Agencia Federal de Inteligencia (AFI, que reemplazó a la SIDE), ubicados en las direcciones de Inteligencia Antiterrorista y Contrainteligencia y en la ex Dirección de Observaciones Judiciales. «Se trata de cajas con informes que, si se los ordenara linealmente, ocuparían una recta de casi dos kilómetros», informó a Télam una fuente de la investigación, que aseguró también que se trata de documentos que dan cuenta de cómo se manejaron los servicios de inteligencia en relación al atentado. Más información. El informe oficial sobre el proceso de desclasificación de información reservada o secreta sobre el atentado de 1994 y su encubrimiento.
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